Hotel Explore Cano Dulce

Decidí hacer mi matrimonio en el lugar porque tuve una primer buena estadía y el espacio me atrapó. Sin embargo todo el evento se vino abajo por la atención de los dueños y su equipo. Durante la boda los meseros cobraron 50mil pesos colombianos de propina obligatoria a todos los invitados. Al recoger los platos de las mesas votaban toda la comida por el balcón dirección al mar. Al siguiente día y delante de nosotros, decidieron tomar los postres que sobraron de la boda, para dárselos a la gente que llegaba a su pasadía, como cortesía de la casa. Si no pido cuentas del trago, no me dicen cuánto han bebido. La cena de los novios completamente diferente lo que nos propusieron en la degustación del menú. Les negaban a los decoradores, músicos y fotógrafos el agua que yo dispuse y compré para ellos. En medio de la cena había un sapo nadando en la piscina. El primer piso del pastel lo repartieron en servilleta de papel al final de la fiesta y si al siguiente día no nos acordamos de llevarnos el segundo piso no nos lo dicen. Las habitaciones supremamente caras, sin nada adicional que ofrecer. A la novia le negaban el trago, agua y comida que ella misma pagó. Y lo peor fue que al día siguiente los novios tuvieron que cargar sillas para llevarse el evento, porque para ellos era más importante atender a la gente que llegaría ese dia más que al evento que salía. Muy mala experiencia, no con el lugar en sí, sino con la atención, pésimo servicio. El dueño dice ser el administrador del HOTEL CROWN PLAZA de Barranquilla, pero por lo visto no conoce nada de hostelería, o simplemente no le interesa controlar a su personal. El evento lo salvaron las cosas externas contratadas de quien si doy buena fe.