Hotel Nievesol

Hotel Nievesol es un lugar fantástico para realizar rutas con sus actividades diarias guiadas, el buffet del desayuno es riquísimo y están 24h disponibles. Sin duda lo recomendaría.

Quite a detailed review, largely because some information on the hotel is difficult to find. As has been mentioned by others, the hotel could do with some updating and redecoration, but this was not a problem for us, and everything seemed clean. Designed for winter, so no A/C: potentially an issue with temperature in mid/upper 30s, but our room was cool enough with windows open throughout the night (no insects). We took the half board option, which was very good value for the location and season, with a small discount for advance booking. Breakfast was very good, with a wide range of products: no complaints except the coffee was truly dreadful! The restaurant is definitely a dining room. Dinner consisted of three choices for starters and main courses, and a dessert "buffet" (some "industrial" cakes, tired looking fruit and I had the last slice of melon). Two of the starter options were steamed broccoli and lettuce salad with 4 anchovy fillets. Main courses 2 meat, 1 fish were simple and good, although the fish was served only with a few salad leaves. They have an efficient system, serving quite quickly, and most people leave without lingering over their meal or ordering coffee. Nice outdoor terrace, as well as indoor bar and lounge space. Reasonable bar (and restaurant wine) prices: trained bar staff who made a range of drinks. Various tours and advice on local hiking routes etc are offered. Finally, the pool is not the hotel's: it is the town pool, around 200-300m away. Free entry to hotel guests with a card you can get from reception with a cash deposit: this information was not offered at check in. We would return, but eat dinner elsewhere. However, the hotel offers good value, especially for families with younger children.

La chambre était convenable mais quelconque... déco qui date... En revanche je déconseille formellement le "restaurant" si on peut appeler ça un restaurant... il n'y avait que la pastèque dans le buffet des desserts qui était mangeable.

Está claro que el hotel es de 3* pero después de estar alojado en él lesobran dos. Habitaciones diminutas, las que dicen triples son para dos y las cuadruples casi ni para tres. Armarios ridículos, no creo que se puedan llamar ni armarios, muebles habitaciones ni hace falta conentar, baño ni de refugio de montaña, ruido por todas partes, personal de recepción y Bar amabilidad la justa, casi sientes que molestas, desayuno lo mismo cada día y malo... en fin ni que me paguen vuelvo a este "Hotel"

hotel muy normal, muy pobre en el menú de las cenas y poca variedad en postres. Desayuno bien, y habitacion normal, almohadas muy bajas. Hay mejores hoteles de montaña. No pienso volver ni recomendarlo a nadie.

Hotel grande y preparado para el esquí al que hemos acudido desde hace más de veinte años. Habitación muy espaciosa, con zona para quitarse las botas de nieve y con todos los elementos necesarios para estar cómodos. Recepción rápido. El desayuno es muy bueno, merece la pena contratarlo a no ser que solo se desayune con un café y poco más. Precio adecuado para la oferta y condiciones del hotel.

Un hotel de montaña agradable y familiar con un trato muy bueno. Lo que ofrece es acorde a su categoría (a diferencia de otros hoteles de 4 estrellas que realmente son de 3), si bien las habitaciones (al menos la que nos tocó) era algo pequeña. El buffet pequeño pero completo.

Hemos vivido un ejemplo claro de como un solo "trabajador" puede en un momento destrozar el trabajo de toda la plantilla de un hotel. Tras pagar más de 80€ por persona por la cena de Nochevieja (además de estar alojados varias noches cinco miembros de mi familia) un personaje detrás de la barra del bar del hotel se negó a ponernos unas copas a las 23:40 del día 31 de diciembre de 2023 con el argumento de que él tenía que tomarse las uvas. Increible!!!

Hemos vuelto este año al hotel Nievesol y volvemos realmente encantados igual que hace dos años. A destacar su cocina y su servicio en el restaurante muchas gracias Andrés por ser tan atento y recuerdos también para Ana servicio habitaciones y también servicio de de restaurante por acordarse de mis hijos después de dos años. Este año también quería resaltar la ayuda que nos prestó Javier en el servicio de alquiler de botas y Esquis nos ayudó muchísimo y es una persona encantadora. todo el Hotel está formado por gente encantadora un Hotel sencillo en el que la limpieza es fundamental, en el que la cocina es muy buena y en el que te sientes muy a gusto repetiremos de nuevo muchas gracias